Fuente: Finanzas
La polémica ley de ‘desahucio exprés’, aprobada el pasado mes de octubre, acaba de estrenarse a las puertas de la Navidad. Este jueves ha entrado en vigor con el fin de garantizar la “seguridad judírica” de las viviendas en alquiler y dar un impulso a los propietarios para que apuesten más por este mercado, pues es una de las grandes apuestas del Gobierno para los próximos años. Asimismo, desde el ministerio de Vivienda se ha asegurado que está ley también garantizará los “derechos de los inquilinos de buena fe” y que uno de sus objetivos es deshacerse de la gran cantidad de viviendas vacías que existen actualmente en España.
Primero, ha aumentado el número de casos para impedir una prórroga obligatoria del contrato de alquiler. También permite el propietario echar a los inquilinos para poder ceder la vivienda a algún familiar en el caso de que se divorcie o anule su matrimonio. Asimismo, agiliza los trámites y plazos de los casos de impago de alquiler para que el propietario pueda recuperar antes su vivienda y también proporciona facilidades para que las comunidades de propietarios puedan llevar a cabo obras que mejoren el ahorro de energía y agua. “Unos mecanismos más eficaces para la agilización de los procesos incrementará la confianza de los propietarios e inquilinos y contribuirá a reducir los precios y a evitar la exigencia de garantías excesivas (avales y fianzas)”, añade el gabinete de Beatriz Corredor.
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